El enfoque multidisciplinar de nuestros tratamientos odontológicos nos permite ofrecer soluciones integrales en pacientes con patologías dentarias y/o que desean mejorar su estética dental.
Asimismo contamos con servicios propios que evitarán que tenga que desplazarse a servicios externos para obtener pruebas necesarias para su diagnóstico y tratamiento.
La Ortodoncia es la especialidad de la odontología que nos permite tratar las irregularidades dentales y maxilares para conseguir una correcta función y estética dentofacial. La edad determina nuestras opciones terapéuticas:
No suele ser necesario realizar tratamientos con aparatología pero si revisar posibles hábitos perjudiciales para su desarrollo y ajustes oclusales.
En estas edades se pueden aplicar distintas técnicas:
La ortodoncia interceptiva corrige anomalías de recambio dentario, de tamaño de arcadas y hábitos inadecuados.
La ortopedia dentofacial nos permiten corregir alteraciones en el tamaño de los maxilares.
La ortodoncia fija multibracket mueve la dentición definitiva de forma precisa hacia una oclusión equilibrada.
La dentición puede moverse sin límite de edad en ausencia de enfermedad periodontal y/o patología dental. Así, podemos conseguir objetivos funcionales y estéticos adecuados a las necesidades de cada paciente. Para ello contamos con tres tipos de aparatología fija:
Brackets metálicos: los últimos avances en el diseño y tratamiento de superficie que disminuyen la fricción durante el movimiento dentario han permitido disminuir drásticamente la duración de los tratamientos y mejorar, con el empleo de menor carga, la tolerancia a los tratamientos.
Brackets estéticos (transparentes): la discreción que aporta esta solución respecto a los brackets metálicos hacen ellos una alternativa de gran demanda especialmente en pacientes adultos.
Ortodoncia lingual: se trata de brackets que se adhieren a la superficie lingual dentaria (no visible), con la incorporación de nuevas tecnologías en esta disciplina se ha mejorado en la comodidad y duración de tratamientos siendo así cada vez más aceptados.
En los casos de alteraciones severas del tamaño y posición de los maxilares recurrimos a la combinación de ortodoncia con cirugía ortognática como tratamiento de elección.
La implantología nos permite restaurar la ausencia de dientes en los maxilares a través de fijaciones biocompatibles de titanio que se integran en el hueso y dan soporte a las coronas dentales. El avance en las técnicas de regeneración ósea actuales nos proporciona más posibilidades en la aplicación de implantes en áreas de atrofia ósea maxilar.
Un implante es una estructura prefabricada, tiene forma de raíz dental, está hecho de titanio y se coloca en el hueso maxilar donde hay pérdida de dientes.
Sobre el implante se coloca la corona dentaria que reproduce el diente ausente o una estructura de soporte para varias coronas dentarias en el caso de ausencias múltiples.
Todos los pacientes requieren una valoración médica general y un estudio del volumen y calidad del hueso, la encía, el resto de los dientes y la articulación témporo-mandibular.
En la primera se coloca el implante (una sesión de 30 minutos). Se cierra la mucosa y se espera la maduración ósea en torno al implante de 4 a 6 meses.
Pasado ese tiempo en una segunda fase se coloca la prótesis.
En nuestra clínica trabajamos con el Straumann® Dental Implant System. Se trata de una técnica avalada por una compañía líder en implantología, restauración, y en regeneración tisular oral. Compañía única a nivel mundial que proporciona soluciones desde el aumento de hueso y regeneración periodontal, pasando por implantes y pilares, hasta empastes, coronas y puentes cerámicos individualizados. Ofreciendo la última tecnología y un gran servicio a profesionales y pacientes. Desde su fundación hace más de 50 años, la compañía se ha caracterizado por su pasión por la innovación, rigor científico y visión empresarial. Esto ha llevado a crear soluciones significativamente innovadoras, que han ido conformando los estándares industriales de hoy en día.
La colaboración exclusiva de Straumann con el International Team for Implantology (ITI), una renombrada e independiente organización científica con más de 5.000 destacados expertos, es única en la industria. Esta colaboración garantiza que los métodos y productos tienen una base científica, ya que están documentados y testados exhaustivamente para proporcionar soluciones extraordinarias y sostenibles para cualquier indicación clínica.
Las técnicas de colocación del implante y la corona en el mismo día han supuesto un gran avance y por tanto su demanda y aceptación por parte de nuestros pacientes ha ido en aumento en los últimos años. Pese a ello hay que señalar que se trata de una técnica que requiere unas condiciones e indicaciones concretas y por tanto no son extensibles a todos los casos.
Los sistemas regenerativos (Emdogain, BoneCeramic, Bone Block Fixation, Bio-oss) actuales nos permiten resolver una de las principales limitaciones en la colocación de un implante que es la ausencia de un correcto soporte óseo y periodontal.
Con la aparición de la imagen tridimensional mediante tomografía digital podemos conseguir un modelo virtual de la anatomía del hueso maxilar y podemos planificar con gran precisión la mejor solución implantológica para cada caso. Así seleccionamos el implante ideal para cada posición y el mejor sitio para colocar cada implante. Con esta aplicación podemos ofrecer con gran exactitud la mejor solución para cada paciente.
En torno a un 2-3% de los tratamientos con implantes no se produce tejido óseo sino fibroso y estos no quedan firmes en el hueso. Después de unos meses de regeneración, en la mayor parte de los casos se puede volver al colocar otro implante sin mayor complicación. El origen de este problema obedece a múltiples causas y es un campo abierto en los principales grupos de investigación implantológica.
Los problemas en la articulación temporomandibular son debidos a los distintos trastornos que alteran la salud del sistema masticatorio y que presenta como signos y síntomas más frecuentes dificultad masticatoria, ruidos articulares y dolor.
El dolor en el área orofacial es un motivo de consulta recurrente en la clínica dental. El dolor dentario originado por la caries y las afectaciones periodontales son la causa más habitual. Sin embargo existen otras fuentes de dolor, generalmente de tipo crónico, cuyo diagnóstico exigen un grado de conocimiento más profundo y que tienen su origen en los distintos elementos que componen el sistema masticatorio: la articulación temporomandibular, la musculatura orofacial, vasos sanguíneos, nervios y glándulas. En ocasiones no coincide la zona de dolor con su origen, es lo que conocemos como dolor referido y que normalmente tiene su origen en puntos gatillo musculares.
Los puntos gatillo miofasciales y su significación en los procesos dolorosos así como sus métodos de tratamiento propuestos por los doctores J.G.Travell y D. G. Simons en su ya célebre Tratado del Dolor y Disfunción Miofascial constituyen la guía actual en la toma de decisiones terapéuticas. Los síntomas asociados a estos trastornos pueden descubrirse con un cuestionario básico:
El ortodoncista necesita para un tratamiento completo de estas patologías la colaboración de diferentes especialistas de la medicina como un rehabilitador, otorrinolaringólogo o neurólogo, y también de fisioterapeutas y psicólogos. Existen una gran variedad de tratamientos para los desórdenes temporomandibulares y todos ellos deben de ser aplicados teniendo en cuenta las necesidades individuales de cada paciente. Los tratamientos se pueden resumir en grupos en función del origen y lugar de aparición de la patología: alteraciones musculares, articulares, dentarias, etc. Para ello recurrimos a diferentes técnicas terapéuticas:
Tratamientos de Ortodoncia: La oclusión es la forma de relacionarse la arcada dentaria superior con la inferior. Cuando esta no es correcta en ocasiones recurrimos a la ortodoncia que nos permite mediante movimientos dentarios conseguir un mejor equilibrio masticatorio.
Rehabilitación con prótesis: La ausencia de dientes desencadena un desequilibrio en el reparto de fuerzas masticatorias, los pacientes pueden necesitar una prótesis dental para crear una mordida estable para solucionar un desorden temporomandibular. Las prótesis pueden ser fijas, removibles, mixtas o sobre implantes.
Férulas de descarga: Para relajar la musculatura masticatoria, disminuir el dolor articular y evitar el desgaste dentario.
Fisioterapia: La fisioterapia corrige la correcta tonicidad de grupos musculares y las articulaciones y restaura el equilibrio postural de la cadena cabeza - cuello - hombros - espalda. También reduce el dolor y la inflamación, relajando los músculos y aumentando los movimientos de la mandíbula. El uso de aparatos de TENS, ultrasonidos y láser blando contribuye a mejorar la recuperación.
Infiltraciones: De igual forma, las infiltraciones intraarticulares de sustancias reparadoras del cartílago de la articulación temporomandibular, como el ácido hialurónico, pueden ayudar a tratar los cuadros de artritis y/o artrosis de esta articulación. Las infiltraciones intramusculares de anestesia local o toxina botulínica pueden ser de gran utilidad en el tratamiento de algunos tipos de dolor muscular mandibular.
Técnicas de control de la tensión: El estrés diario supone un aumento de la actividad muscular que sobrecarga las superficies articulares y dentarias así como la propia musculatura. Las técnicas de relajación y el biofeedback ayudan al paciente a aprender a controlar su tensión muscular.
Cirugía: La cirugía se usa muy raras veces, pudiéndose evitar con carácter general si los desórdenes temporomandibulares se diagnostican y se tratan a tiempo. Esta únicamente indicada en aquellos casos en los que el tratamiento conservador no ha proporcionado unos resultados satisfactorios, hecho que solo ocurre en una minoría de pacientes.
La corrección del tamaño, color y forma de los dientes en el marco de la sonrisa es posible hoy en día con un alto grado de precisión a través de técnicas de blanqueamiento y modelados con composites de última generación o restauraciones en cerámica.
A pesar de denominarse así no podemos hablar de un “blanqueamiento” en sentido estricto, sino aclarar ya que no se altera el color propio del diente.
El color de un diente viene determinado, desde que nacemos, por la tonalidad de la dentina y por la transparencia y capacidad de refracción de la luz del el esmalte. El color de la dentina no se altera con el paso del tiempo, sin embargo, el esmalte se va tiñendo a base de sustancias colorantes como pueden ser el tabaco, los pintalabios, el café, el té, el tomate, pigmentos químicos, bebidas de cola, uso de determinados medicamentos, etc.
En consecuencia, el blanqueamiento dental consiste en eliminar del esmalte, por medio de sustancias químicas, todas aquellas partículas que alteran su color original.
La eficacia del tratamiento es proporcional al grado de tinción de los dientes que han sido oscurecidos a lo largo de los años por sustancias colorantes. El tratamiento resulta menos eficaz, e incluso inútil, en dientes oscurecidos por alteraciones intrínsecas, como ingesta de tetraciclinas durante la infancia, alteraciones congénitas de esmalte, etc.
En cuanto a la duración del efecto blanqueador, depende en gran medida del tipo de alimentación que siga el paciente tras el tratamiento. Así, en una persona fumadora, que bebe vino y toma café regularmente, el efecto del blanqueamiento se perderá con más rapidez.
Se trata de finas láminas de porcelana que se colocan cubriendo toda la superficie anterior de los dientes. No se desgastan con el tiempo, no pierden el brillo y mantienen intacto su color. Se unen fuertemente al diente por medio de un adhesivo especial.
Se emplean fundamentalmente para enmascarar anomalías del color de los dientes que no pueden tratarse mediante el blanqueamiento convencional. También se emplean para disimular alteraciones en el tamaño o forma dentales, dando al diente un aspecto más natural.
Las resinas de última generación suponen un gran avance ya que cada día mejoran sus propiedades mecánicas y estéticas. Se realizan con el material con el que se hacen los empastes pero optimizadas con el fin de conseguir una estética superior. Tienen la ventaja de ser más económicas, conservar íntegro el esmalte y realizarse en una sola sesión.
En ocasiones, cuando el paciente sufre un impacto fuerte en la boca o muerde algo duro, una carilla puede fracturarse o descementarse. En caso de descementación, si la carilla está intacta, se vuelve a adherir. Si se ha roto, sencillamente se vuelve a hacer otra en pocos días. Mientras se confecciona la nueva carilla, se coloca otra carilla provisional de composite.
La periodoncia es una especialidad dentro de la odontología dedicada al estudio y tratamiento de las enfermedades que afectan a la encía y hueso que rodean y que dan soporte al diente, fundamentalmente gingivitis y periodontitis. Son causadas por la placa bacteriana que se adhiere a la superficie dentaria en ausencia de cepillado dental. De manera indolora se va produciendo la pérdida del hueso que rodea al diente lo que supondrá su pérdida si no se trata a tiempo.
El periodoncista, como odontólogo especialista en este campo, da solución a estos problemas en función del grado de destrucción. Se comienzan estos tratamientos siempre con instrucciones de higiene oral al paciente, esto es de vital importancia ya que si no se colabora en este aspecto los resultados serán poco duraderos.
El periodoncista se encargará de la eliminación de bacterias con métodos mecánicos en áreas superficiales (limpieza supragingival) y profundas (raspaje y alisado radicular) así como su control posterior en el tiempo. En los casos más complejos se requieren el empleo de técnicas de cirugía periodontal cuyo objetivo será limpiar la raíz bajo control visual, eliminar recovecos que favorezcan la infección, eliminar la inflamación, favorecer la regeneración de tejidos periodontales, eliminar los tejidos enfermos y crear una arquitectura periodontal fisiológica y estética.
Hoy en día los principales grupos de investigación centran sus esfuerzos en la obtención una auténtica regeneración de todas las estructuras periodontales aplicando diversos procedimientos. Estos son técnicas quirúrgicas asociadas al empleo de hueso de sustitución, membranas de barrera (regeneración tisular guiada) y factores de crecimiento y proteínas de matriz.
En definitiva, se trata de aplicar técnicas ya no solo para evitar la pérdida dentaria sino incluso regenerar los tejidos de soporte perdidos.
La importancia de la salud dental a edades tempranas es garantía de un correcto desarrollo para el futuro. Por ello, consideramos esta especialidad prioritaria en la integración de nuestro equipo con especial atención en aquellos pacientes donde la ansiedad, el miedo o patologías que condicionan la conducta durante los tratamientos dentales nos vuelve más exigentes.
El niño presenta dientes temporales, que en unos años se pierden, pero una caries o una pérdida precoz de estos dientes nos pueden llevar a una infección o una pérdida de espacio que darán lugar a problemas durante el recambio dentario condicionando así la función masticatoria.
La prevención es el pilar básico para tener una correcta salud bucodental:
Mediante la sedación consciente se elimina la ansiedad o el miedo generado por la visita al dentista. Además, el paciente entra en un estado de relajación y somnolencia, pero sin perder la facultad de responder a las órdenes del odontólogo, ya que no se trata de una anestesia general.
La presencia de un anestesiólogo que realice una sedación consciente es la manera más confortable y segura de recibir su tratamiento dental, tanto para el paciente como para el odontólogo. Se administra a través de una vena de la mano que se canaliza al inicio de la sesión. Una vez acabada la sesión mediante otros fármacos se eliminan rápidamente los efectos de la sedación para que el paciente pueda volver a su casa en perfecto estado, acompañado de un familiar o amigo.
Está indicada en personas con miedo o fobia a los procedimientos dentales, en personas ansiosas o para todo aquel que quiera un grado de confort extra en su visita al dentista. Otra indicación importante son los tratamientos de larga duración en una única sesión de varias horas, ya que con este método se pueden realizar con una excelente tolerancia por parte del paciente.
Nuestro gabinete radiológico consta de un moderno equipo de radiología que permite obtener imágenes de:
La radiología 3D (obtención de imágenes reales a partir de un análisis radiológico) posibilita mediante la técnica radiológica y el software, la reproducción de la anatomía oral en una imagen virtual y el diagnóstico de patologías y diseñar y simular tratamientos implantológicos, quirúrgicos y ortodóncicos.